- Si has recibido una notificación del gobierno solicitando información adicional o programando una inspección fiscal.
- Si has experimentado cambios significativos en tu negocio, como un aumento o disminución significativa en los ingresos o en el número de empleados.
- Si has cometido errores en tus declaraciones de impuestos anteriores o si sospechas que has pagado demasiados impuestos.
- Si has hecho cambios significativos en tu estructura empresarial, cómo convertirte en una empresa de propiedad familiar o fusionarte con otra empresa
- Si tienes un descontrol y poca certeza en tus declaraciones mensuales y anuales.